top of page

We Have Always Lived in the Castle

Siguiendo en mi empeño por leer las obras de Shirley Jackson, le llega el turno a We Have Always Lived in the Castle. El ejemplar que me leí tenía un prólogo introductorio sobre la vida de Jackson y el contexto de la obra, así como un poco de análisis sobre el trasfondo de los personajes. Lo menciono porque me resultó muy útil hacer una lectura rápida antes de leer la novela y releerlo al terminarla para comprender mejor ciertos conceptos o teorías sobre la historia.


Dicho esto. El libro

We Have Always Lived in the Castle, Shirley Jackson
Portada vía Goodreads

Autora: Shirley Jackson

Año: 1962

Género: Terror/Clásico

Páginas: 146

Valoración: ★★★★☆

Sinopsis: Mi nombre es Mary Katherine Blackwood. Tengo dieciocho años y vivo con mi hermana Constance. A menudo pienso que con un poco de suerte podría haber sido una mujer lono, porque mis dedos anular e índice son igual de largos en ambas manos, pero he tenido que conformarme con lo que soy. No me gusta bañarme, ni los perros, ni el ruido, me gusta mi hermana Constance, y Richard Plantagenet, y la Amanita phalloides, el hongo de la muerte. El resto de mi familia está muerta…












We Have Always Lived in the Castle tiene una atmósfera muy similar a La Maldición de Hill House con la casa aislada y el misterio familiar. Creo que lo que más me gusta de la narración de Jackson es que deja muchas cosas al entendimiento del lector, pero puedes deducirlas de ciertos comportamientos y situaciones. Además, me parece majestuoso cómo Jackson te tiene dudando constantemente si hay algún componente paranormal en la historia o no y se burla de ti por creer que va a ir por esos derroteros. Sabe que en lo que estás pensando y en un punto de la historia te lanza un órdago que no dura más que la primera impresión, porque en cuanto lo piensas, es evidente que no es posible.


Lo que más me gusta de la narración de Jackson es que deja muchas cosas al entendimiento del lector.

Es una obra con un subtexto impresionante, lo que, en una lectura superficial, podría parecer una narración anodina de la extraña rutina de una familia muy rara, con una hermana claramente un tanto perturbada, es en realidad una historia mucho más profunda. Tocando temas como la salud mental, el trauma, los mecanismos de defensa de una persona tras una situación muy traumática, los secretos familiares, la ambición, la crueldad del pueblo contra el individuo…


No quiero escribir mucho más sobre este libro porque en seguida me metería en terreno spoilers y creo que es mejor adentrarse en We Have Always Lived in the Castle solo con la críptica sinopsis de Merricat.


Voy a acabar diciendo que es una lectura corta que recomiendo mucho. No es de terror propiamente dicho, si esperáis no poder leerlo de noche, nada más lejos de la realidad. Pero sí tienes una sensación inquietante continua, como si supieras que está a punto de pasar algo, y no algo bueno precisamente. El final es agridulce, no esperéis algo súper trágico ni que las cosas se arreglen por arte de magia.


Pensaba dejar la reseña en el libro, sin embargo, una noche buscando una película para ver me di cuenta de que tenía marcada como pendiente una película llamada We Have Always Lived in the Castle. Estaba un poco confusa porque la había marcado antes de saber de la existencia del libro, hasta que vi que la protagonizaban Taissa Farmiga, Sebastian Stan y Crispin Glover.


We Have Always Lived in the Castle
Poster vía IMDb

Género: Drama/Misterio/Thriller

Año: 2018

Duración: 96 min

País: EEUU

Dirección: Stacie Passon

Guion: Mark Kruger (basado en la novela de Shirley Jackson)

Producción: Furthur Films, Albyn Media

Reparto: Taissa Farmiga, Alexandra Daddario, Crispin Glover, Sebastian Stan, Joanne Crawford.

Sinopsis: Merricat y Constance Blackwood viven en la mansión familiar con su tío Julian seis años después de que la tragedia azotara a la familia. Tras pasar años en aislamiento, la llegada del primo Charles amenazará con destrozar los cimientos de su rutina y desenterrar el secreto que llevan ocultando desde "el incidente".











A estas alturas de la vida está bastante claro que las películas que veo se dividen en dos grupos:

  1. Las que me interesan de verdad por la trama.

  2. Las que veo porque sale el crush de turno o algún actor al que tengo especial cariño.

We have always lived in the castle, en el momento en el que la añadí a la lista, pertenecía claramente al grupo 2. Taissa Farmiga me gusta desde la primera temporada de American Horror Story e intento ver las cosas que va sacando, Crispin Glover era George McFly en Regreso al Futuro (nada más que añadir), y a Sebastian Stan ¿le habéis visto? Pues eso.


Después de leer el libro me pareció que sería buena idea ver la película y comprobar hasta qué punto traduce bien el espíritu de las hermanas Blackwood, por saber si con ver la película se va servido o mejor leerse la novela.


Mi conclusión es que se complementan mutuamente. Ver la película por no leerse el libro, teniendo en cuenta lo corto que es, no me parece que merezca la pena, sobre todo porque te llevas una imagen de Merricat que, en mi opinión, deja bastante de lado la imagen original del personaje. Creo que una de las principales diferencias entre las dos obras es que Merricat, en el libro, vemos que no está bien, pero seguimos su proceso mental mucho mejor, entendemos cómo, dentro de su lógica, lo que hace tiene sentido y sigue unas normas. En la película simplemente parece perturbada. Taissa Farmiga lo hace estupendamente, pero creo que se han esforzado demasiado en hacer que Merricat parezca un bicho raro, cuando la imagen que a mí me transmitió Shirley Jackson es de una muchacha que en el exterior parece muy normal, pero tiene sus cosillas. No se nota que la Merricat del libro me ha gustado más ¿verdad?


El tío Julian (Crispin Glover) creo que está un poco dejado de lado, cuando realmente a veces da muchas pistas de la verdadera naturaleza de la familia. Se supone que cuando aparece el primo Charles (Sebastian Stan), Julian empeora notablemente, al tener tan poco protagonismo en la película, tan apenas se nota. Además, las hermanas lo tratan de una forma muy específica que creo que en la película no acaba de traslucir.


De Alexandra Daddario creía que no había visto nada, pero resulta que ha salido en American Horror Story: Hotel. Como no recordaba a su personaje, es como si la hubiera visto por primera vez en esta película, y estoy gratamente sorprendida. Encarna perfectamente el espíritu de Constance Blackwood, es muy sutil y consigue hacer traslucir con una sonrisa cosas que en el libro son apenas visibles. Fantástica. Es posible que su actuación y sus sonrisas sean una de las cosas más creepys de la película.


Y por último está Sebastian Stan, que no sé cómo se las apaña para hacer siempre papeles de malo maloso o de absoluto gilipollas. En este caso un poco de los dos y si en el libro el primo Charles ya me sacó muchísimo de quicio, en la película es incluso peor. Es tan insoportable, tan pagado de sí mismo y tan transparente en sus acciones que cada vez que abría la boca me era inevitable poner los ojos en blanco. Por poner una pega, eché de menos la escena final del libro con el fotógrafo porque es cuando se ven más claras sus intenciones, aunque la justicia servida en la película también está muy bien.


La magia de We Have Always Lived in the Castle, el libro, es la sutileza y la ambigüedad con respecto a la realidad.

A excepción de detalles como el que acabo de mencionar, la película es una muy buena adaptación del libro de Shirley Jackson. Quizá se podría decir que peca un poco de exagerada en algunos momentos, supongo que para hacer llegar el mensaje más claramente a la audiencia, lo cual me saca un poco de la narrativa, porque la magia de We Have Always Lived in the Castle, el libro, es la sutileza y la ambigüedad con respecto a la realidad. ¿Hay elementos sobrenaturales? ¿La magia funciona? Todas estas cuestiones en la película se dejan rápidamente a un lado y se centra más en los aspectos terrenales de la narración, dejando la magia de Merricat en un segundo plano, como las tonterías de una muchacha que no está bien. Por otro lado, la fotografía y la estética general de la película es preciosa. Tiene esa atmósfera brillante y colorida que detrás esconde elementos muy oscuros, y eso me encanta.


Si os interesa la historia, creo que el mejor approach es leer el libro (la edición con el prólogo creo que es muy buena opción) y luego ver la película para poder captar los detalles y sutilezas que en libro pueden perderse, pero que en la película son mucho más claras.



Dadle a like, compartid y dejadme sugerencias para los próximos posts. También podéis seguirme en Twitter para enteraros de cuándo subo algo nuevo.

Kommentarer


bottom of page